Comunicado. Después de realizar un estudio en adultos jóvenes con edades promedio de 29.3 ± 10.3 años en 101 ciudades de México, se observó que la población estudiada manifiesta sintomatología compatible con el trastorno de estrés postraumático en más del 50% de los casos y en 22.6% también existe un trastorno específico del sueño, el trastorno de la conducta del sueño en fase MOR (movimientos oculares rápidos), informó Lilian Calderón Garcidueñas, investigadora de la Universidad del Valle de México y la Universidad de Montana.
Calderón dijo que el estudio titulado “Tronco cerebral cuádruple aberrante hiperfosforilado Tau, beta-amiloide, alfa-sinucleína y TDP-43, estrés y trastornos del comportamiento del sueño”, publicado recientemente en la revista científica International Journal of Environmental Research and Public Health, se centró en el vínculo entre el trastorno de estrés postraumático y el trastorno MOR de la conducta del sueño, debido a la evidencia en la literatura de un aumento significativo en el riesgo de neurodegeneración en pacientes con trastorno de estrés postraumático y trastornos del sueño MOR.
La investigadora agregó que un antecedente importante de esta investigación es la evidencia documentada en la última década de las patologías neurodegenerativas y cardiovasculares que afectan a los habitantes de la CDMX desde la infancia, como resultado de la exposición de nanopartículas magnéticas ricas en metales producto de la combustión de gasolinas y diesel y las procedentes de los desechos electrónicos, ubicuas, aerotransportadas e inhaladas y deglutidas por todos los residentes de la CDMX y que se transportan al cerebro y al corazón de la población.
Hoy también publicamos las siguientes notas y más...
Cofepris alerta sobre producto “milagro” sin registro
Novavax reporta caída de casi el 20% en sus acciones