Encuesta en Argentina, Chile, Colombia y México muestra déficit de hierro en mujeres en edad fértil

Comunicado. Un tema de salud fundamental en las mujeres emerge como una preocupación silenciosa pero significativa para millones de ellas en edad fértil. Más allá de la anemia, reconocida por ocho de cada 10 mujeres encuestadas como la principal consecuencia de esta condición, la deficiencia de este nutriente clave para la producción de energía tiene implicaciones profundas para el bienestar diario de la mujer, la productividad y, crucialmente, para un embarazo saludable y el desarrollo óptimo del bebé.

Por ello, se realizó una encuesta en Argentina, Chile, Colombia y México, la cual revela bajo reconocimiento del impacto del déficit de hierro. La encuesta conducida online a nombre de CSL Vifor y aplicada a mujeres entre 18 y 48 años, encontró que 80% de las participantes no está completamente familiarizado con la deficiencia de hierro y sus implicaciones, situación que se acentúa en el grupo de mujeres más jóvenes. Aunque 77% la considera un problema de salud importante, persisten brechas significativas en la comprensión de sus causas, consecuencias y manejo adecuado.

Por ejemplo, mientras 42% asocia correctamente la deficiencia de hierro con baja productividad en actividades diarias, sólo 16% la vincula con el ausentismo laboral. El déficit de hierro y la anemia consecuente representan una carga de discapacidad significativa para las mujeres globalmente.

Además, aunque se reconocen síntomas comunes como la fatiga extrema (71%) y la debilidad (59%), existe menor conciencia sobre pruebas diagnósticas clave como la ferritina (conocida por menos del 30%), un indicador esencial de las reservas de hierro recomendado por la OMS.

Para las mujeres que planean ser madres o ya están embarazadas, la atención al hierro es vital. Los datos muestran un aumento de la prevalencia del déficit durante la gestación que se duplica cada trimestre: del 5.3% en el primer trimestre, aumenta al 12.7% en el segundo y alcanza un preocupante 27.5% en la recta final del embarazo.

Alvaro Cabrera, hematólogo y experto en deficiencia de hierro, explica que llegar al embarazo con bajos niveles de ferritina sérica o desarrollar deficiencia durante la gestación se asocia con un riesgo significativamente mayor de anemia materna, parto prematuro y bajo peso al nacer), además de impactos a largo plazo en la función cognitiva del niño. “Durante el embarazo se necesitan unos 1.040 mg de hierro en total: 450 mg para aumentar la sangre materna, 300–350 mg para el feto y la placenta, 230–240 mg para compensar las pérdidas; este mineral es clave para el crecimiento de la placenta y el desarrollo del sistema nervioso del bebé”.

Según la OMS, el 40% de las embarazadas presenta anemia al inicio de la gestación, lo que evidencia la alta prevalencia de reservas bajas de hierro antes de concebir.

 

 


Hoy también publicamos las siguientes notas y más...

Lilly de México anuncia que tirzepatida ahora es autorizada para el control del peso

Boehringer Ingelheim apuesta por 20 nuevas terapias en los próximos años

 

 


Noticias