Comunicado. Los virus del papiloma humano (VPH) son capaces de producir varios tipos de cáncer en ambos géneros: cuello de útero, vulva, vagina, ano y orofaringe; y, en contraste con otros tipos de virus, para los VPH ya se cuentan con excelentes vacunas, acceso a técnicas diagnósticas de alto rendimiento y fiabilidad y una estrategia mundial de prevención coordinada por la OMS, condiciones que parecen ideales para la eliminación de las infecciones y sus consecuencias.
“Globalmente, estimamos el número de casos de cáncer generados por estas infecciones en unos 600 mil por año y el número de fallecimientos en unos 300 mil por año. Se trata pues, de un problema significativo de salud pública y de inequidad social. Efectivamente, la mayoría de los casos y de las muertes asociadas se producen en países de bajo nivel de desarrollo en África, América Latina y Asia”, explicó Xavier Bosch, profesor asociado de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universidad Oberta de Catalunya (UOC) y consultor emérito del Instituto Catalán de Oncología (ICO).
Con el fin de conseguir erradicar este tipo de cáncer a escala mundial, la OMS ha puesto en marcha una campaña contra el VPH para 2030: vacunar al 90% de las niñas menores de 15 años, ofrecer un cribado de calidad (prueba de VPH) a un 70% de las mujeres a los 35 y a los 45 años, y tratar adecuadamente el 90% de los casos de pre cáncer y de cáncer identificados en el cribado.